Alemania enfrenta una creciente dependencia de importaciones en tecnologías clave como chips de computadora y baterías eléctricas, advierte Deloitte en un estudio reciente. Es especialmente preocupante la concentración de importaciones de semiconductores de Asia, en particular de Taiwán, que es responsable de casi un cuarto de las importaciones alemanas. Ante las tensiones políticas entre Taiwán y China, así como la dominancia de China en baterías y el recurso de litio para las mismas, Deloitte ve la necesidad de actuar para fortalecer la resiliencia de la economía alemana.
Mientras que para la producción de chips existen buenas condiciones debido a la adquisición mayoritariamente europea de silicio, se revela una dependencia crítica de las importaciones de litio de China. Deloitte recomienda la diversificación de las cadenas de suministro, por ejemplo, mediante el aumento de importaciones desde Argentina y la explotación de yacimientos locales, para reducir la vulnerabilidad de Alemania ante escaseces globales de suministro y crisis políticas.
El informe resalta la urgencia de un realineamiento estratégico para proteger la economía alemana de posibles pérdidas y asegurar su competitividad a largo plazo en el campo de la alta tecnología.