El gigante tecnológico Google ve en peligro su ambicioso objetivo de alcanzar la "neutralidad de carbono" para 2030 debido a la alta demanda de energía de sus sistemas de IA.
Según el informe ambiental publicado el martes por la empresa de Silicon Valley, las emisiones de gases de efecto invernadero de Google han aumentado un 48 por ciento en los últimos cinco años. Esto se debe principalmente a la expansión de sus centros de datos que apoyan la inteligencia artificial (IA). En 2023, la contaminación de Google fue de 14,3 millones de toneladas de CO2 equivalente, un aumento del 13 por ciento en comparación con el año anterior.
Google admitió que el aumento de las emisiones "pone de manifiesto el desafío de reducirlas" mientras se invierte en el desarrollo de grandes modelos de lenguaje y la infraestructura relacionada. Según la empresa, los impactos medioambientales de la IA son "complejos y difíciles de predecir".
Kate Brandt, directora de sostenibilidad en Google, subrayó que la empresa sigue buscando la meta para 2030, aunque destacó la naturaleza "extremadamente ambiciosa" de dicha meta. "Seguimos esperando que nuestras emisiones aumenten antes de reducirse", dijo Brandt.
Brandt agregó que Google "está trabajando muy duro" para reducir sus emisiones, incluso mediante la firma de contratos de energía limpia. También hay "enormes oportunidades para soluciones de protección climática habilitadas por IA", dijo.
Mientras Google, Amazon y Microsoft invierten miles de millones de dólares en IA, los científicos del clima han expresado su preocupación por los impactos ambientales de estas herramientas y sistemas que requieren mucha energía. En mayo, Microsoft admitió que sus emisiones han aumentado casi un tercio desde 2020, lo que se debe en gran parte a la construcción de centros de datos.
Los problemas de generación y transmisión de energía ya representan un desafío para las empresas que desean expandir la nueva tecnología. Analistas de Bernstein explicaron en junio que la IA "podría duplicar la tasa de crecimiento de la demanda de electricidad en EE. UU. y el consumo total podría superar la oferta actual en los próximos dos años".
En el informe ambiental de Google se informó que las emisiones relacionadas con la energía de la empresa aumentaron un 37 por ciento en 2023 en comparación con el año anterior y representaron en total una cuarta parte de todas las emisiones de gases de efecto invernadero. Las emisiones de la cadena de suministro (el mayor porcentaje, que equivale al 75 por ciento del total de las emisiones) también aumentaron un 8 por ciento.
Google se ha comprometido a alcanzar cero emisiones netas directas e indirectas de gases de efecto invernadero para 2030 y a utilizar energía libre de carbono durante cada hora de cada día dentro de cada red en la que opera. Sin embargo, la empresa advirtió que la "finalización" de algunos proyectos de energía limpia en 2023 ha reducido la cantidad de energías renovables disponibles.
Al mismo tiempo, el consumo de energía de los centros de datos de Google ha "superado la capacidad de llevar a cabo más proyectos de energía limpia en los EE. UU. y en la región de Asia y el Pacífico". El consumo de energía de los centros de datos de Google aumentó un 17 % en 2023 y representó, según estimaciones de la empresa, alrededor del 7-10 % del consumo global de energía de los centros de datos. Los centros de datos también consumieron un 17 % más de agua en 2023 en comparación con el año anterior, según Google.
