Puma mantiene su dividendo a pesar de la devaluación del peso argentino en el cuarto trimestre. El consorcio alemán de ropa anunció el martes que propondrá a la junta general de accionistas el 22 de mayo un dividendo de 82 céntimos de euro por acción (0,89 dólares) para el año 2023, la misma cantidad que el año anterior.

Esto significa que Puma pagará a sus accionistas una participación del 40,3% de las ganancias netas anuales, en comparación con el 34,7% del año anterior. Según la compañía, este aumento se debe a un fuerte flujo de caja libre y a una evolución positiva del negocio. El flujo de caja libre se ha más que duplicado el año pasado, alcanzando los 369 millones de euros.

"Sin la excepcional devaluación del peso argentino, que tuvo un significativo efecto contable único, nuestros resultados habrían sido aún más fuertes", dijo el CEO Arne Freundt. "Esto refleja el sólido desempeño de Puma." En enero, Puma había anunciado que la decisión del gobierno del presidente Javier Milei de devaluar el peso argentino en un 54% en diciembre para contener la persistente alta inflación, había contribuido especialmente a una caída en las ganancias.

La utilidad neta en el cuarto trimestre cayó a 800.000 euros desde 1,4 millones de euros, en línea con las cifras preliminares que Puma había publicado el mes pasado. El resultado operativo, un indicador clave para analistas e inversores, aumentó en el cuarto trimestre de 40,5 millones de euros a 94,4 millones de euros.

Las ventas disminuyeron un 9,8% en cifras reportadas y un 4% en una base ajustada por moneda a 1,98 mil millones desde 2,20 mil millones de euros. La empresa espera que las tensiones geopolíticas y los vientos macroeconómicos adversos continúen pesando en el ánimo de los consumidores y en la demanda, especialmente en la primera mitad del año.

"Esperamos un primer semestre más débil. Los efectos negativos continuos de la moneda también ejercerán presión sobre la rentabilidad en la primera mitad del año 2024", indicó Freundt. Puma prevé para este año un crecimiento en las ventas ajustado por divisas en el rango medio de un solo dígito y un EBIT entre 620 millones y 700 millones de euros, basándose en la suposición de que la depreciación del peso argentino será completamente compensada por aumentos de precios en el país.