La Carnival Corporation, un operador de cruceros, advierte sobre impactos negativos en el resultado anual debido al colapso de un puente clave en Baltimore, que ha paralizado el tráfico marítimo en un puerto utilizado por Carnival. La empresa estima que la interrupción tendrá un efecto de hasta 10 millones de dólares en la ganancia ajustada anual. Un barco de la Carnival Cruise Line zarpaba todo el año desde Baltimore, informó el director ejecutivo Josh Weinstein en una teleconferencia con inversores. Sin embargo, la compañía ha logrado asegurar un amarre temporal para este barco en Norfolk, Virginia, "lo que debería ayudar a minimizar cambios operativos".

Las acciones de Carnival se mantuvieron casi sin cambios en el comercio de media mañana. En el último año, la acción ha aumentado en más del 90%. La caída de las ganancias en Baltimore no se ha tenido en cuenta en la previsión anual de la empresa. Carnival ha elevado su pronóstico de ganancia ajustada por acción para el año en cinco centavos a 98 centavos por acción.

Carnival informa una pérdida de 214 millones de dólares o 17 centavos por acción para el primer trimestre fiscal que terminó el 29 de febrero, una mejora en comparación con la pérdida de 693 millones de dólares o 55 centavos por acción en el período correspondiente del año anterior. Tras ajustes por ítems únicos, incluyendo costos por amortización y modificación de deudas, la pérdida ajustada fue de 14 centavos por acción. Los analistas esperaban, según FactSet, una pérdida ajustada de 18 centavos por acción. Los ingresos aumentaron casi un 22% a 5.41 mil millones de dólares, pero estuvieron por debajo de los 5.42 mil millones de dólares anticipados por los analistas.

Weinstein explicó que la empresa logra trasladar precios más altos a los clientes sin afectar la demanda, los clientes además reservan con más antelación de lo históricamente habitual, lo que da confianza a Carnival para poder llenar sus barcos este verano sin descuentos de última hora. El director financiero David Bernstein explicó que precios más altos, mayores gastos a bordo y un aumento en la ocupación ayudan a compensar más que de sobra las repercusiones financieras de las interrupciones en los cruceros causadas por el conflicto en el Mar Rojo.