Starbucks en un punto de inflexión: ¿Oportunidad de compra o inversión arriesgada?

La acción de Starbucks ha superado al mercado durante largos períodos, pero desde el inicio de la pandemia, la empresa ha enfrentado desafíos. En los últimos años, Starbucks ha experimentado varios cambios de liderazgo, incluyendo el regreso del ex CEO Howard Schultz. A pesar de estas medidas, el futuro de la empresa sigue siendo incierto, con resultados mixtos y un camino por delante poco claro. Para los inversores, esto significa una decisión difícil. La acción de Starbucks ha caído un 21 % en comparación con el crecimiento del 12 % del S&P 500. Esto podría representar una oportunidad para comprar una acción generalmente exitosa a un precio bajo. Sin embargo, también podría indicar que Starbucks se encuentra en un punto de inflexión peligroso. Las cifras de ventas recientes muestran que los ingresos del tercer trimestre del año fiscal 2024 están estancados, las ganancias por acción han caído un 6 % en comparación con el año anterior y el margen operativo se ha reducido. No obstante, Starbucks sigue siendo la mayor cadena de cafeterías del mundo, con más de 39,000 tiendas y $9.1 mil millones en ingresos en el tercer trimestre. Curiosamente, muchos de los problemas actuales de la empresa se deben a una incapacidad para satisfacer la demanda, lo que subraya su popularidad sostenida. Al mismo tiempo, Starbucks tiene dificultades para adaptarse a las tendencias cambiantes. Al igual que hace unos 15 años, cuando la empresa atravesó una fase complicada y logró reposicionarse exitosamente como el "tercer lugar" entre el hogar y el trabajo, debe transformarse nuevamente. La tendencia al trabajo remoto y un estilo de vida digital hacen que sea más difícil para Starbucks satisfacer las preferencias digitales de sus clientes. Las largas colas y el servicio lento son quejas frecuentes. Starbucks se posiciona como una cafetería premium, lo que en el contexto actual de cargas financieras debido a la inflación afecta la disposición de los clientes a comprar. En un entorno donde un café de $6 se considera innecesario, estos problemas contribuyen a la actual situación desfavorable. El equipo de liderazgo está dividido sobre cómo avanzar. El CEO Laxman Narasimhan, quien lleva un año en el cargo, apuesta por ofertas de valor y promociones, mientras que Howard Schultz insiste en mantener la imagen premium. Una reducción de precios podría diluir la imagen premium, mientras que el enfoque en clientes premium podría resultar en la pérdida de clientes. Sin embargo, existen escenarios donde Starbucks podría, mediante la mejora del servicio y productos de calidad, continuar atrayendo a su clientela premium sin reducir los precios. El segmento de lujo ofrece altos márgenes, como demuestra el caso de LVMH. Schultz ve en la mejora del servicio al cliente la clave para recuperar la confianza del consumidor. Para los inversores, podría ser prudente esperar y observar el desarrollo futuro. Starbucks ha desmentido a los críticos en el pasado y podría hacerlo nuevamente. Sin embargo, las nuevas estructuras y estrategias de liderazgo deben demostrar su eficacia antes de que la acción vuelva a ofrecer oportunidades de crecimiento atractivas.