Tensiones en el campamento de protesta de Tesla: Escalación posible a pesar del cumplimiento de las condiciones

Eulerpool News
·


En la sombra de las gigantescas instalaciones de producción de Tesla en Grünheide se está gestando un tumulto. Se acerca el plazo para que los manifestantes allí presentes desmantelen sus casas en los árboles provisionales, y aún así, el movimiento de protesta "Parar a Tesla" no muestra signos de flexibilidad. A pesar de las directrices emitidas por la autoridad de asambleas –que explícitamente prohibían pasar la noche en esas construcciones– algunos activistas pasaron la noche allí arriba. La resistencia contra las casas en los árboles, clasificadas como un riesgo de seguridad, constituye el punto culminante actual de las tensiones en el lugar. La iniciativa, que se opone vehementemente a la deforestación de un área de bosque para la planeada expansión de la planta de Tesla con inclusión de una estación de carga, no ha cumplido con las condiciones y ahora tiene que enfrentarse a las consecuencias. Se especula que podría haber un desalojo del campamento por parte de la policía si para el lunes no se alcanza un acuerdo –un escenario que no es descartado por la política interior de Brandeburgo bajo el ministro de la CDU, Michael Stübgen. Los protestas, que llevaron a la prevención de la expansión de las instalaciones de fabricación, han tenido apoyo de los habitantes de Grünheide. La comunidad ha propuesto un compromiso que implicaría la deforestación de solo una parte del bosque. Pero eso no parece calmar a los activistas. Ellos están siguiendo una estrategia de resistencia legal y han presentado una solicitud de medida cautelar ante el Tribunal Administrativo de Potsdam, que busca una suspensión de las condiciones. Hasta ahora, la solicitud no ha provocado una respuesta visible por parte de las autoridades. El movimiento siente un impulso, liderado por la portavoz de la iniciativa "Parar a Tesla", cuyo llamado a la movilización ha resultado en un crecimiento constante en el número de manifestantes. Existe la esperanza de que el campamento pueda convertirse en un foco de resistencia, pero también hay preocupaciones sobre una posible radicalización –expresada por el ministro del Interior Stübgen, quien anunció una intervención contundente de la policía. A pesar de la situación de amenaza actual, la fábrica del fabricante de coches eléctricos Tesla sigue siendo el centro de atención pública, no solo por la ocupación continua, sino también debido a actos de sabotaje que afectaron la producción. La planta cuenta ya con unos 12.500 empleados y continúa su expansión desde su apertura en marzo de 2022.