El Reino Unido renuncia a nuevos aranceles de importación para los BEV chinos.

El gobierno británico ha anunciado que no seguirá el ejemplo de la Unión Europea, que recientemente decidió imponer aranceles a las importaciones de vehículos eléctricos de baterías (BEVs) chinos. Así lo declaró el ministro de Comercio Jonathan Reynolds al margen de la Cumbre Internacional de Inversiones en Londres. Mientras que la UE, tras una investigación de un año sobre las subvenciones estatales en China, decidió implementar nuevos gravámenes, la posición británica sigue siendo clara: no hay necesidad de medidas similares en la isla. En la cumbre en el histórico Guildhall, se reunieron líderes en tecnología, industria y finanzas para discutir oportunidades de inversión en el Reino Unido. El gobierno británico anunció con orgullo al final del día compromisos de inversión por un total de 63 mil millones de libras esterlinas, una clara señal de confianza en el mercado británico, a pesar de las actuales y desafiantes condiciones económicas globales. Jonathan Reynolds enfatizó que la Autoridad de Recursos Comerciales (TRA) no ha recibido quejas de la industria automotriz británica sobre las importaciones de BEVs chinos. Añadió que su oficina está observando la situación de cerca, pero es importante no ignorar las diferencias entre la industria británica y la de la UE. "Aún la industria no ha solicitado que el caso sea remitido a la TRA", afirmó Reynolds. Este enfoque diferenciado muestra que el Reino Unido sigue su propia ruta en política comercial y económica.