El banquero de inversiones Michael Kramer demanda a su antiguo empleador Perella Weinberg Partners (PWP) ante el tribunal. El veterano jefe de la división de reestructuración de la renombrada firma de Wall Street acusa al banco de haberlo despedido injustamente en 2015, junto con tres colegas, para apropiarse de millones en compensaciones y participaciones. PWP, por su parte, afirma que Kramer planeaba fundar una empresa competidora, violando así sus compromisos contractuales.

La demanda, que se juzga el viernes en Nueva York, lleva a destacados dirigentes de Wall Street al estrado. Los fundadores de PWP, Joe Perella y Peter Weinberg, así como el alto banquero Robert Steel, testificarán que Kramer, con documentos confidenciales, presentaciones e informes comerciales, preparó en secreto la fundación de una empresa competidora.

Kramer niega las acusaciones y argumenta que fue víctima de un complot en el que PWP lo empujó intencionadamente fuera de la empresa. Los documentos judiciales afirman que PWP sistemáticamente marginó, pagó insuficientemente y asignó malas evaluaciones de desempeño a la división de reestructuración bajo su liderazgo para justificar su despido. Además, una correspondencia interna de correo electrónico mostró que Weinberg quería "devolverlo a su jaula".

Ein zentrales Beweisstück im Prozess ist die Aussage des damaligen PWP-Managers Kevin Cofsky. Er hatte PWP informiert, dass ein Treffen in Kramers Haus Anfang 2015 der Gründung einer neuen Firma gedient habe. Kramer hält dagegen, Cofsky habe seine Darstellung übertrieben, um eine Beförderung und eine Prämie von 500.000 US-Dollar zu erhalten

Se considera que el caso es un precedente para la aplicación de prohibiciones de competencia en el sector financiero. Una decisión preliminar del tribunal de 2023 confirmó que tales cláusulas siguen siendo válidas en Nueva York.

Die wirtschaftlichen Folgen der Auseinandersetzung sind erheblich. Kramer fordert die Rückgabe von 60 Millionen US-Dollar an Vergütungen und Beteiligungen. PWP hingegen beziffert die Verluste durch verlorene Einnahmen, unrechtmäßige Boni und kostspielige Neueinstellungen auf mehrere Dutzend Millionen Dollar.

Tras su despido, Kramer fundó Ducera Partners, que se estableció como uno de los principales asesores de reestructuración y recientemente generó ingresos de alrededor de 150 millones de dólares. Al mismo tiempo, PWP logró reconstruir su negocio de reestructuración y salir a bolsa en 2021.

Es wird erwartet, dass der Prozess drei Wochen dauert und weitreichende Auswirkungen auf die Anwendung von Wettbewerbsverboten in der Investmentbanking-Branche haben könnte.