Elon Musk presentó una nueva demanda contra OpenAI y su CEO Sam Altman el lunes. La demanda fue presentada en un tribunal federal en California, aproximadamente dos meses después de que Musk retirara una demanda similar en un tribunal estatal. En la nueva demanda, Musk hace acusaciones adicionales contra Altman y el cofundador Greg Brockman, incluyendo la acusación de violación de la ley federal contra el crimen organizado.
Según la demanda, Altman, en colaboración con otros demandados, engañaron deliberadamente a Musk y otros inversores al hacerles creer que OpenAI se dedicaría a una "misión humanitaria". La demanda alega que Altman y Brockman convencieron a Musk para cofundar OpenAI, prometiendo crear una alternativa más segura y abierta a las empresas tecnológicas impulsadas por el lucro. Sin embargo, una vez que la tecnología de OpenAI estuvo cerca de alcanzar la inteligencia artificial transformativa (AGI), Altman cambió la narrativa y comenzó a obtener beneficios financieros a través de una asociación con Microsoft.
OpenAI cerró un acuerdo de inversión con Microsoft en enero de 2023 por un valor de 10 mil millones de dólares, que aseguró al gigante tecnológico una participación en las ganancias de OpenAI y le permitió integrar la tecnología de OpenAI en sus servicios de nube y búsqueda. Desde 2019, Microsoft ha invertido alrededor de 13 mil millones de dólares en OpenAI, lo que le ha dado a la empresa una ventaja en la carrera hacia sistemas de IA poderosos.
La compleja estructura de inversiones de Microsoft en OpenAI ha provocado investigaciones antimonopolio por parte de las autoridades estadounidenses y europeas. Musk ahora pide al tribunal que decida si los modelos más recientes de OpenAI han alcanzado la AGI. Este hito declararía el acuerdo de licencia con Microsoft como "nulo y sin efecto", ya que la inversión de Microsoft solo incluye una participación en las ganancias de OpenAI "previas a la AGI". Musk afirma que OpenAI tiene un interés financiero en retrasar el reconocimiento público del logro de la AGI.
Además, Musk exige una compensación basada en una "liquidación de todas las ganancias, beneficios y ventajas" que OpenAI ha obtenido a través de sus contribuciones.
El nuevo litigio es el más reciente punto de inflexión en el conflicto continuo entre Musk y Altman, dos figuras prominentes del Silicon Valley que compiten por la dominación en IA. Este conflicto comenzó cuando Musk abandonó la junta directiva de OpenAI en 2018 debido a desacuerdos sobre la dirección de la investigación. Un año después, se fundó la división con fines de lucro de OpenAI.
El año pasado, Musk fundó su propia start-up de inteligencia artificial con fines de lucro, xAI. El mes pasado, anunció que buscaría la aprobación de la junta directiva de Tesla para que el fabricante de automóviles, del cual él es CEO, invirtiera 5 mil millones de dólares en la empresa. xAI fue valorada en 18 mil millones de dólares en una ronda de financiación en mayo. OpenAI fue valorada en 86 mil millones de dólares en una oferta de participación para empleados en febrero. Musk afirma en la demanda que la empresa fue valorada recientemente en 100 mil millones de dólares.
OpenAI se negó a comentar sobre la nueva demanda. La compañía había calificado la demanda anterior de Musk como "incoherente y frívola" y publicó en un blog varias de las correos electrónicos de Musk de los primeros días de la empresa, que parecían mostrar que Musk sabía que la empresa necesitaría recaudar grandes sumas de dinero para financiar los recursos informáticos necesarios para el desarrollo de modelos de IA. El abogado de Musk, Marc Toberoff, dijo al New York Times que la "demanda anterior no tenía fundamento". "Esta es una demanda mucho más poderosa", añadió.