Bayer ha ganado una importante victoria en la disputa legal sobre el herbicida Roundup: El Tribunal Federal de Australia ha archivado el último caso pendiente en el país. El fallo confirma una decisión anterior del mismo tribunal, que en un razonamiento de 322 páginas no encontró relación científica entre el ingrediente activo glifosato y el linfoma no Hodgkin.
Desde la adquisición de Monsanto en 2018 por 63 mil millones de dólares, Bayer enfrenta una ola de demandas. Críticos acusan a la empresa de que el glifosato es cancerígeno. Bayer, por otro lado, se refiere a evaluaciones científicas y regulatorias globales, incluida la de la Autoridad Australiana de Plaguicidas y Medicamentos Veterinarios, que califican al glifosato como seguro.
Der juristische Erfolg in Australien verschafft Bayer zwar eine Atempause, doch in den USA setzt sich die Rechtsunsicherheit fort. Das Unternehmen gab an, in 15 der letzten 22 Prozesse positive Urteile erzielt zu haben. Zudem strebt Bayer eine Überprüfung durch den Obersten Gerichtshof der USA an, um zu klären, ob bundesstaatliche Warnhinweisklagen durch Bundesrecht ausgeschlossen sind. Gleichzeitig schloss der Konzern mögliche Vergleiche nicht aus, sofern diese im Unternehmensinteresse liegen.