El debilitado conglomerado inmobiliario Adler Group planea una amplia reestructuración, en la cual la mayoría de la empresa pasará a los tenedores de bonos. Estos poseerán en el futuro el 75 por ciento de todos los derechos de voto, según informó la empresa la tarde del viernes. El 25 por ciento restante de los derechos de voto será representado por las acciones ordinarias actualmente en circulación.

Como contrapartida, el vencimiento de las deudas existentes de Adler se extenderá hasta diciembre de 2028, diciembre de 2029 y enero de 2030. Además, el capital social se fortalecerá mediante la conversión de una gran parte de las existentes llamadas bonos 2L en bonos subordinados perpetuos por alrededor de 2,3 mil millones de euros.

Además, Adler recibe nuevo capital por valor de 100 millones de euros. Asimismo, se permite a la empresa retener ingresos de venta de hasta 250 millones de euros.

Estas medidas tienen como objetivo asegurar la estabilidad financiera del Grupo Adler a largo plazo y fortalecer la posición de la empresa en el mercado inmobiliario.

La reacción de los inversores fue positiva: la acción de Adler se disparó en la plataforma de comercio Tradegate un 57,76 por ciento hasta los 0,2600 euros en comparación con el precio de cierre en XETRA.